Alineados antes de emprender la marcha.
Las zanjas no son problema.
Los descensos pronunciados, tampoco.
Meter la rueda sí puede ser un problema.
Aunque todo tiene solución.
A veces, los vehículos parece que vuelan.
Pero la realidad del terreno acaba por imponerse.
Polvo, sudor… por fortuna, no se llegó a las lágrimas…
…Y se posó con las máquinas como si se tratara de artistas.